10 cosas que debes hacer en San Cristóbal de las Casas

Una de las ciudades coloniales más bonitas del país, San Cristóbal de las Casas es el punto de partida perfecto para explorar bellezas naturales, visitar poblados con encanto, entender de diversidad cultural y probar excelente café, tal vez uno de los mejores del país. Acá un listado de actividades, para nosotros, imperdibles.

Descubre el centro y su historia

La mejor forma de explorar San Cristóbal es perderte entre sus calles sin un rumbo definido, así irás descubriendo sus colores, sus aromas y sus sabores a tu paso. El centro es pequeño, así que seguramente pasarás por las calles, plazas e iglesias principales. Tip: a la catedral hay que regresar de noche para verla iluminada. La arteria principal es Real de Guadalupe, en donde encontrarás las tienditas locales.

Entra a los museos

Los más tradicionales son el Na Bolom, que promueve el arte y la cultura de las comunidades indígenas, y el Museo del Ámbar, dedicado a esta resina utilizada en la joyería chiapaneca. Aunque nuestro favorito es el Centro de Textiles del Mundo Maya, a un costado de la Iglesia de Santo Domingo, que muestra una impresionante colección de tejidos, en un edificio con arquitectura bellísima.

Toma un bote por el Cañón del Sumidero

Este parque nacional comenzó a formarse hace 70 millones de años y aún continúa abriéndose año con año. El resultado es un impresionante estrecho rodeado por distintos tipos de vegetación, principalmente selvas y bosques de pino. También es hogar de algunas especies en peligro de extinción, como cocodrilos de río, monos araña y ocelotes. Puedes recorrerlo en lancha, parar en alguno de sus miradores o practicar ciclismo de montaña.

Bebe un buen café

El café de Chiapas es, sin lugar a dudas, uno de los más distinguidos del país. Si bien siempre está la opción de visitar una finca cafetalera en los alrededores para involucrarte en su proceso, la mejor manera de disfrutarlo dentro de la ciudad es en Cafeología, un proyecto integral dedicado a encontrar, tostar y preparar cafés de excelencia, que no encontrarás en otro lugar. Después del primer sorbo nos agradeces.

Y también un buen chocolate

Después de un día de caminata, no hay mejor forma de descansar los pies que en Kakaw, un museo de cacao y chocolatería (algunos de sus productos tienen premios internacionales). En el piso superior aprenderás cómo es que los mayas utilizaban el cacao como parte de su vida y en el piso inferior podrás probar delicias de productores locales. Hay que estar al pendiente de las catas, que van desde bombones hasta la tradicional bebida posh.

Explora los mercados locales

Los mercados locales siempre son la forma de terminar de entender una ciudad. En este caso son tres: el Mercado de Dulces y Artesanías, ideal para comprar algún gustito y para probar el posh, la bebida local; el Mercado Municipal, mucho menos turístico y más cercano a un mercado real; y el Mercado de Santo Domingo, perfecto para encontrar textiles, artesanías y joyas para regresar a casa.

Visita las cascadas del Chiflón

Este recorrido te tomará un día entero, pero vale completamente la pena. Conforme vayas caminando por el sendero, rodeado de hermosa vegetación, te irás encontrando con una cadena de distintas cascadas formadas por el cauce del río San Vicente, hasta llegar al Velo de Novia, una bellísima caída de agua de 120 metros de altura que da hacia una alberca natural de aguas turquesa.

Duerme en un hotel-boutique

Parte del encanto de la ciudad son sus pequeños hoteles-boutique. Nuestro favorito es Hotel Bo, pues está ubicado en el corazón de la ciudad pero por su diseño moderno y su ambiente —mezcla de naturaleza y estilo único— da la sensación de escape total. Las habitaciones son muy espaciosas y las áreas comunes muy cómodas, al grado de que en algún punto te costará salir de ahí.

Disfruta la gastronomía local

Si bien puedes dedicar toda tu energía a probar los antojitos locales —con especial énfasis en los tamales chiapanecos—, San Cristóbal tiene una interesante oferta de restaurantes gourmet. Comenzando por El Secreto, comida chiapaneca con un twist. El plato estrella: los tacos crujientes de pato. Una opción más chic es Lum, que sirve recetas de México con elementos modernos.

Haz un day-trip a San Juan Chamula y Zinacantán

La mejor forma de entender la mezcla cultural chiapaneca es adentrarte en sus poblados. En San Juan Chamula se asienta una gran comunidad tzotzil. Lo mismo en Zinacantán, donde se dedican principalmente al cultivo de flores y a la producción de textiles. Una vez ahí los niños suelen invitarte a sus casas para mostrarte sus maravillosas artesanías y, de paso, ofrecerte quesadillas con tortillas hechas a mano acompañadas de deliciosas salsas.